martes, diciembre 19, 2006

Opinión- Germán Robles

Cuarta República.


Teledictadura: amenaza a la seguridad nacional.
Publicado en la Jornada Jalisco,19-dic-06

Germán Robles Castañeda.
Redes Ciudadanas.

El fuerte control, manipulación y persuasión que el duopolio televisivo Televisa y TVAzteca ejercen sobre la información y la vida pública no son un asunto aislado ni menor. Las comunicaciones y su salvaguarda son tarea estratégica de cualquier país que se digne de ser soberano e independiente; no son aspectos aislados de la vida social, no se trata de la simple telecracia como muchos afirman, porque si ese fuera el caso gozaríamos de un régimen informativo basado en la pluralidad, diversidad y equidad económica de medios, cosa inexistente y que el duopolio se empecina en obstaculizar. Por ello tenemos que hacer valer el precepto que hace del espacio aéreo un bien nacional.

El análisis de los medios electrónicos de comunicación pasa imperiosamente por la comprensión de que el papel de los anteriores es formar parte indispensable para el sostén del orden social de las clases dominantes; es decir, son un aparato que concatenado con otros de carácter ideológico, constituyen el aparato de dominio del Estado dentro del esquema de sociedades capitalistas. Los arquetipos, sofismas y prejuicios políticamente correctos son correspondientes en los tres ejes de la manipulación ideológica ejercida por las escuelas (con programas fabriles y proclives al interés de la clase dominante) la iglesia y los grandes medios electrónicos. Por todo lo anterior se deduce que la influencia política, como cultural que ejerce este monstruo bifurcado es de trascendencia para el futuro democrático, para la educación y valores, ergo, la viabilidad socioeconómica de un país, los cuales si entran en crisis tal como hoy ocurre, se puede ver bajo amenaza la seguridad nacional.

En México se ha confundido el concepto de “libertad de prensa” en el sentido de que la prensa está libre del control del gobierno, bajo este eufemismo la teledictadura se escuda para tachar a cualquier disidencia, crítica, control o equilibrio gubernamental como actos represivos a la libertad de expresión y los califica absurdamente como “ley mordaza”. Se vale también de estos falsos dilemas para atacar y calumniar a periodistas, políticos y comunicadores -con difícil derecho a réplica- cuyas ideas no concuerden o amenacen intereses que implican a los detentores de los grandes medios, es decir, el interés económico de los grandes grupos financieros y empresariales quienes son los dueños y están detrás de los medios de comunicación. Que empresas privadas ejerzan el derecho a la información, y la existencia del control de los mismos no está a discusión, lo que se cuestiona es el significado de dichos controles que en la práctica obstaculizan la expresión de ideas, limitan los contenidos de calidad y enajenan toda información legitima y social si es ajena a sus intereses.

Nuestro país ha vivido acelerados cambios en las últimas décadas, los procesos democráticos se han transformado, cayó el antiguo régimen priísta, cuyo autoritarismo fortaleció el poder e influencia de Televisa principalmente; destacando los tiempos del diazhordacismo donde el único canal informativo era la fuente oficial y cualquier contradicción era penalizada, Televisa asumía la difusión, respaldo y beneplácito mediático de los actos de gobierno a fin de enmascarar golpismos políticos, la guerra sucia, el fatídico 68, devaluaciones y demás trapacerías del gobierno en turno.

Televisa sigue allí, sin reforma, ni democracia doméstica mayor que pueda evitar la enorme contradicción entre discurso y realidad; en esencia el consorcio no ha cambiado, y ha violado una de las reglas comunes de los grandes medios en países capitalistas y desarrollados: no pudo evitar las posiciones de grupos de franca posición fascista, ello quedo demostrado en el pasado proceso electoral de 2 de julio por medio de una intensa y costosa guerra sucia con cargo al erario público y compromiso de futuras prebendas mediáticas.

Es ingenuo considerar que con la transformación y venta salinista del otrora IMEVISIÓN iba a haber realmente pluralidad, competencia y democracia en medios, que sería el inicio de una etapa de mayores alternativas en la información. No, en absoluto, no hay análisis que resista esos supuestos; vivimos una creciente de represión de voces y contenidos políticos, los cuales están limitados a canales “minoritarios” por decirlo de algún modo. México nunca ha tenido democracia, fuera del dogma constitucional, ni derechos huecos que constituyen letra muerta hasta nuestros días, transitamos de dedazo en dedazo, por un régimen autoritario, que después de traicionar los principios de la revolución, nos dio una nueva dictadura neoliberal que se inauguró con Miguel de la Madrid; durante dichos periodos, y en el ínterin de la mal llamada “transición mexicana”, el antiguo Tele sistema mexicano ha prevalecido como dictadura mediática, por lo tanto de tipo ideológica como política, causando brutales daños en la conciencia y memoria colectivos, en la estructura mental de generaciones.

Televisa es el principal enemigo de la democracia, y su manipulación, sesgo, producen una coerción cultural que lo constituyen como el poder real, encima, por mucho de cualquier orden y poder de gobierno; es hoy uno de los principales eslabones del circulo vicioso social, que impele a la clase política mexicana a ceñirse a sus dictados, salir a cuadro es lo único que les importa, figurar; por ello es ingenuo considerar que desde el poder público, con estos actores, se vaya a establecer un equilibrio que reduzca el fuerte control que tanto Televisa como TV Azteca ejercen sobre los medios y la información. Mucho menos aún podemos esperar en el largo plazo la reforma fundamental a la Ley General de Radio y Televisión. De ahí que la tarea la tendrá que hacer forzosamente la sociedad civil, somos los ciudadanos los que debemos convocar y someter al duopolio bajo intensa presión, entre los objetivos, demandar la derogación de todas las reformas perversas de la llamada “Ley Televisa”. Recalco que es tarea desde abajo, pues el estado por su vocación capitalista no eliminará la fuerte inclinación a la conformidad y conservadurismo en los medios.


La falacia del círculo verde.

A los propietarios de TV Azteca y Televisa en particular les da por protestar que no están interesados en la cosa pública, que lo suyo es vender, programar para el entretenimiento de las masas, difundir conocimiento educación (sic), etc. Pero como afirma el teórico socialista Ralph Miliband “Es ingenuo o hipócrita afirmar que todos estos propósitos son incompatibles con la promoción de ideas políticas”, de ahí que la injerencia política que tiene el duopolio es imperativa cuando se trata de salvaguardar sus intereses de clase y posiciones, de ahí que de forma súbita suelen emprender golpes y ataques con gran interés político. ¿Le recuerda algo el beneplácito de Televisa cuando el golpe a Excelsior, o la virulencia con la que reacciono Salinas Pliego cuando Hacienda estaba a la caza del fraude a accionistas del Grupo Unefon?, Sí, cuando de repente se volvió “enemigo” del Fobaproa y nos recetó dos semanas de “denuncia” televisiva. Así Televisa, litigo su ley ante medios, con un sendo editorial de López Dóriga atacando a sus detractores. Y lo último, el golpeo al grupo farmacéutico SABA que amén de sus prácticas “criminales” se sabe que tiene interés de tener una concesión de TV, lo que significa una competencia más para Azcárraga.

Los grandes medios privados, el duopolio que constituye la teledictadura responden ante accionistas y empresarios; los medios alternativos y emergentes deben crecer y desarrollarse, porque ellos estarán obligados a responder a sus comunidades, a los intereses sociales, de ahí la importancia de crear cooperativas para la comunicación, aprovechar las nuevas tecnologías para que se manifieste el sentir de los grupos más vulnerables y la opinión social, que no siempre se halla entre la opinión publicada, confundida con la pública.

Las claves serán la organización alternativa de los medios de comunicación, garantizando un equilibrado régimen de medios públicos en primer instancia, en segundo término un amplio sector cooperativo, con la posesión y control de medios por parte de periodistas, miembros diversos de los medios y grupos sociales, autofinanciados por parte Estado, parte esquemas cooperativistas de la producción. En tercer término medios privados bajo estricto control democrático. Donde se limite a individuos el número de concesiones, y donde se fijen reglas precisas para que los grupos empresariales no se escuden “en la libertad de expresión” para actuar como grupo de choque y financien campañas fascistas y fraudes electorales, que a estos miserables no se les olvide que dicha libertad de expresión es consustancial a individuos y no a empresas o grupos.

Debemos desarrollar ampliamente estas alternativas para cuando sustituyamos a la teledictadura existan los medios fuertes para llenar el espacio y garantizar el derecho amplio a la información. De lo contrario la teledictadura mediará en la reconfiguración de la reconquista de México por parte de medios internacionales, ya lo hacen los bancos, la iglesia busca recuperar sus bienes de ahí el simbolismo de Oaxaca y el silencio de lo que ahí sucede, y Televisa establece sociedad con consorcios españoles de Televisión que quieren influir en México. Si hay que romper el círculo vicioso, habrá que empezar por aquí, terminemos con la teledictadura, es un asunto de seguridad nacional. Así de simple. Así de elemental.


YA BASTA, de que el poder del dinero se imponga a la moral, a la dignidad del PUEBLO DE MEXICO, apoyemos a Obrador

Etiquetas: , , ,

Como autocritaca para la izquierda esta bien, aunque falta precisar unos puntos, que posteare el jueves



Adolfo Gilly
Goldoni en el Congreso de la Unión
Ceremonia de transmisión de poderes el 1º de diciembre. En la gráfica, Vicente Fox, Felipe Calderón, Jorge Zermeño y legisladores del PAN Foto: José Carlo González
Cerrado el episodio electoral, pueden ser útiles algunas reflexiones en torno a sus secuelas. Las enumero.
1. El señor que a las 9:31 del día 1º de septiembre de 2006 entró por la puerta pequeña al recinto del Congreso de la Unión en San Lázaro, era ya el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas. El licenciado Felipe Calderón había recibido ese mando supremo y la declaración de obediencia correspondiente a las 00:01 de ese mismo día, y con ella la investidura presidencial efectiva. La transmisión del mando se había hecho de presidente saliente a presidente entrante, en presencia de los jefes de las armas. Ni modo que los diputados y senadores inconformes le cerraran de verdad el paso a quien ya ese mando ostentaba.
2. Las batallas parlamentarias republicanas, en más de dos siglos de existencia si tomamos a la Convención de la Revolución Francesa de 1789 como punto de partida, tienen sus reglas, sus métodos y su lógica. Esta vez vimos a una fracción minoritaria ­un tercio, más o menos­ de legisladores haciendo sonar silbatos y profiriendo interjecciones en una sesión solemne a la cual estaban legitimando con su presencia, alborotada sí, pero siempre sin romper ni un vidrio (según reza la reiterada consigna). Me parece un franco retroceso.
Una actitud coherente habría sido que los senadores y diputados que se negaban a aceptar la protesta del mandatario entrante le hubieran hecho el vacío. Sin ocupar sus curules en esa sesión, dejándolas como huecos imposibles de ocultar, se hubieran ido al Zócalo con el pueblo que no aceptaba a Felipe Calderón y con aquel a quien ellos han reconocido como presidente legítimo, Andrés Manuel López Obrador.
3. Ahora bien, esa función terminó y los legisladores de oposición, mientras declaran su lealtad al "presidente legítimo" López Obrador, están discutiendo el presupuesto enviado por el Poder Ejecutivo cuyo titular es Felipe Calderón, a quien dicen no reconocer como presidente. No pido que no lo discutan pero ¿en qué quedamos por fin? A mi parecer, se han colocado en la situación de Truffaldino, el protagonista de El servidor de dos patrones, creado por Carlo Goldoni allá por el año 1745. Goldoni definió a su obra como una "comedia jocosa". Me cuesta creer que ésta haya sido la intención de los legisladores.
4. Como por muchos fue advertido a su tiempo, la dualidad de conductas del PRD y el Frente Amplio Progresista (FAP) tiende cada vez más a desorientar y desmovilizar a sus millones de votantes. Es un proceso de deseducación republicana en el cual el desconcierto cundirá.
El "gobierno legítimo" y la Convención Nacional Democrática son ficciones nominales cuya realidad está centrada en la dirección personal de Andrés Manuel López Obrador, un mando al cual han declarado subordinación la estructura entera del PRD y del FAP y cada uno de sus dirigentes.
Es muy su derecho adoptar esa estrategia y sus tácticas correspondientes. Pero aquellos millones de votantes son también millones de cabezas pensantes y actuantes, que no confunden el apoyo político con la subordinación incondicional. Las estructuras clientelares que encuadran a una parte de ellos son mucho más complejas de cuanto se suele pensar y también funcionan desde la periferia al centro y desde abajo hacia arriba.
El desgaste impuesto al conjunto de este gran movimiento electoral por las marchas y las contramarchas (muchos de los que hicieron el plantón poselectoral creían sinceramente que iban a modificar el fallo del Tribunal Electoral, muchos otros creyeron que iban a impedir la toma de protesta); por las aceleraciones y los frenazos; por la conducta errática en torno a movimientos reales como el de Oaxaca; por los intereses contrapuestos de sus grupos dirigentes diversamente instalados en las instituciones estatales de gobierno; se ve aumentado por la contradicción flagrante entre la proclamación de un "gobierno legítimo" alternativo y la participación efectiva en las instituciones del gobierno presidido por Felipe Calderón. ¿Cuál es por fin el juego verdadero?
5. Un programa político no es una sumatoria de veinte o cincuenta puntos o "acciones de gobierno", sino una guía coherente para la actividad y la organización de las fuerzas sociales y la población que lo respaldan. La incongruencia en la acción impide un programa coherente y una discusión racional y acentúa los rasgos de una conducción personal a la cual quedan subordinadas las instancias colectivas.
Estas dejan entonces de ser órganos de discusión y decisión y se convierten, a lo más, en factores de contención o de disuasión de las decisiones del conductor. Este juego de fricciones ocultas es un factor adicional de desconcierto. Para agravarlo, dicha conducción hasta hoy guarda silencio sobre tres temas ineludibles: a) Estados Unidos y su política dominante y agresiva sobre América Latina; b) los derechos de los migrantes mexicanos y latinos dentro de Estados Unidos; c) América Latina, sus movimientos actuales y las políticas para su integración.
6. En esta situación de incongruencia de los políticos es aún más necesaria la precisión en el lenguaje y la claridad en la discusión. Conviene bajarle a los adjetivos y afirmarse en los sustantivos. Conviene abolir insultos y descalificaciones a diestra y siniestra: "pelele", "fecal", "mesías", "traidor", y proscribir aberraciones como la xenofobia o el antisemitismo.
Es necesaria precisión en los términos para identificar quién está en el poder. No es el fascismo, palabra que usada para todo carece de significado. Es nada más y nada menos que la antigua y sólida derecha conservadora mexicana, que desde Iturbide hasta la fecha no necesita modelos externos para existir y actuar. Es la moderna convergencia entre la jerarquía eclesiástica y el poder financiero, indiferentes a los discursos que se comprometen a no romper ni un vidrio, pues sus temores están en otro lado.
Esa vieja y sólida derecha teme a Oaxaca, a Chiapas, a la ciudad de México, a toda la geografía explotada, despojada y oprimida de México. Ha empezado a reprimir en Oaxaca desde el inicio y rápido, pues sabe que tiene poder pero no consenso. El movimiento oaxaqueño, tal cual lo describe Gustavo Esteva ("APPOlogía", en La Jornada, 18 diciembre 2006) sin metáforas extrañas de "dobles poderes" o "comunas", se presenta como la encarnación más tangible de esos temores. Ese movimiento, iniciado antes de las elecciones y fuera de ellas, atraviesa con lógica propia la coyuntura electoral y prosigue su existencia, sin que los partidos hayan encontrado todavía las pinzas para agarrarlo sin que se les escape de las manos o se las chamusque.
7. Parece urgente crear y extender las condiciones para una discusión racional, con pocos adjetivos y muchos sustantivos, independiente de las estructuras organizativas en las que se cree o se descree, entre todos cuantos defienden una república laica y democrática y se oponen al actual poder de la derecha clerical y financiera, aliada de las políticas imperiales de la Casa Blanca y el Pentágono. El punto de partida elemental y definitorio debería ser el acuerdo para la defensa y por la libertad de todos los presos políticos y reprimidos en Atenco, Oaxaca, Chiapas y otras regiones, y por el castigo de los torturadores, violadores y saqueadores en los cuerpos represivos y sus mandantes.
Uno de los bastiones de la democracia y el laicismo está en la UNAM y en las instituciones de educación pública nacionales y estatales. En la pasada campaña electoral, ninguno de los candidatos visitó la UNAM. Sus motivos tendrían. La UNAM es uno de los recintos desde donde aquella discusión razonada puede extenderse.
8. Una república laica y democrática sólo puede serlo si, como primera prioridad, incluye a los indios de México con sus derechos y autonomías, tal como éstos fueron definidos en los Acuerdos de San Andrés y mínimamente formalizados en la ley Cocopa. Cuando el Congreso de la Unión en 2001 desechó esta ley, la república mexicana confirmó la exclusión indígena y el racismo como raíz oculta de sus actuales instituciones.
Reitero lo ya dicho otras veces: no se puede pedir al EZLN, al Congreso Nacional Indígena y a las otras organizaciones indígenas, que acepten frentes, alianzas, pactos o llamados a votar en elecciones que significarían su subordinación a una república que expresamente los ha excluido.
Su voz es indispensable en una discusión nacional. Su capitulación o su sometimiento a las instituciones que los niegan, no.


YA BASTA, de que el poder del dinero se imponga a la moral, a la dignidad del PUEBLO DE MEXICO, apoyemos a Obrador

198 ARMAS NO-VIOLENTAS DE LA RESISTENCIA CIVIL

198 ARMAS NO-VIOLENTAS DE LA RESISTENCIA CIVIL

Los activistas de la lucha pacífica tienen todo un arsenal de "armas no violentas" a su disposición. A continuación figuran 198 de ellas, clasificadas en tres grandes categorías: persuasión y protesta no violenta, desobediencia (social, económica y política) e intervención no violenta. En el volumen dos del libro "The politics of nonviolent action", de Gene Sharp, del año 1973 se describen y se muestran algunos ejemplos históricos de cada uno de estos métodos, y apesar que este texto tiene ya 33 años... y algnos de los métodos quizás han sido superados, de todos no pierde su vigencia. Y si como dijo Andrés Manuel López Obrador en su discurso de la CND debemos ser "creativos", seguramente inventaremos muchas opciones más y esta lista crecerá a miles de posibilidades para resistir al gobierno fraudulento del pelele espurio, pero además la Resistencia Civil Pacífica nos dejará lazos de "solidaridad" para demostrar que se puede crecer hacia una sociedad mas justa, libre y soberana.

Pues aquí van las ideas recopiladas hace 33 años: MÉTODOS DE PERSUASIÓN Y DE LUCHA NO VIOLENTA Declaraciones formales
1. Alocuciones públicas
2. Cartas de rechazo o de apoyo
3. Declaraciones por parte de organizaciones e instituciones (declaración de los sacerdotes en la Francia de Vichy contra la deportación de judíos)
4. Declaraciones públicas firmadas
5. Declaraciones de acusación y de revelación de intenciones
6. Peticiones en grupo o en masa - Comunicación dirigida a públicos más amplios
7. Eslóganes, caricaturas y símbolos (grupo judío Baum en Berlín, 1941-42)
8. Banderas, carteles y otros medios de comunicación visual
9. Octavillas, folletos y libros
10. Periódicos y revistas
11. Grabaciones, radio y televisión
12. Escritura aérea y terrestre. Representaciones en grupo
13. Delegaciones
14. Premios satíricos 1
5. Grupos de presión
16. Montar guardias con piquetes
17. Elecciones satíricas. Actos públicos simbólicos
18. Exhibición de banderas y de colores simbólicos (bandera republicana en España)
19. Uso de símbolos en la vestimenta (uso voluntario de estrellas judías amarillas durante la Segunda Guerra Mundial en señal de solidaridad)
20. Oración y ritos
21. Reparto de objetos simbólicos (ratas, basura, etc.)
22. Desnudos de protesta
23. Destrucción de bienes propios (té en la Norteamérica colonial)
24. Luces simbólicas (velas, etc.)}
25. Exhibición de retratos
26. Pintadas de protesta
27. Uso de signos y nombres nuevos (uso de la denominación "Polonia" en 1942)
28. Sonidos simbólicos
29. Reclamaciones simbólicas (plantación de semillas para reclamar territorios)
30. Gestos groseros. Presiones sobre los individuos
31. "Perseguir" a las autoridades
32. Burlarse de las autoridades
33. Confraternización (ganarse a las personas con una estrategia amistosa deliberada)
34. Vigilias. Representaciones dramáticas y musicales
35. Bromas y sketches satíricos
36. Representaciones teatrales y musicales
37. Cantar. Procesiones
38. Marchas
39. Desfiles (marchas organizadas en señal de protesta)
40. Procesiones religiosas
41. Peregrinaciones (Gandhi en 1947)
42. Desfiles motorizados. Homenajes a fallecidos
43. Luto político
44. Funerales satíricos (p. ej., de la "Libertad")
45. Manifestaciones en funerales
46. Homenajes en el lugar de enterramiento
47. Asambleas públicas Asambleas de protesta o de apoyo
48. Reuniones de protesta
49. Reuniones de protesta camufladas ("banquetes" políticos en Rusia, 1904-1905)
50. Seminarios. Retiradas y renuncias
51. Abandonar la reunión
52. Guardar silencio
53. Renuncia a honores
54. Darse la vuelta MÉTODOS DE DESOBEDIENCIA SOCIAL Exclusión de personas
55. Boicot social
56. Boicot social selectivo
57. Inactividad al estilo Lisístrata (en "Lisístrata" de Aristófanes, las mujeres juraron no mantener relaciones sexuales con sus maridos hasta que éstos no pusieran fin a la guerra)
58. Excomunión
59. Interdicto religioso (excomunión aplicable a una zona o distrito) No colaboración en acontecimientos, tradiciones e Instituciones
60. Suspensión de actos sociales y deportivos
61. Boicot de asuntos sociales
62. Huelga de estudiantes
63. Desobediencia social (confraternización con los parias en la India)
64. Retirada de instituciones sociales Retirada del sistema social
65. Quedarse en casa
66. Desobediencia personal total
67. "Huida" de trabajadores
68. Proporcionar asilo con connotaciones religiosas
69. Desaparición colectiva
70. Emigración de protesta (hijrat) MÉTODOS DE DESOBEDIENCIA ECONÓMICA: BOICOTS ECONÓMICOS Acciones por parte de los consumidores

71. Boicot de los consumidores
72. Negarse a consumir productos boicoteados
73. Política de austeridad
74. Impago de rentas
75. Negarse a alquilar
76. Boicot nacional de consumidores
77. Boicot internacional de consumidores. Acciones por parte de trabajadores y de productores 78. Boicot de trabajadores
79. Boicot de productores Acciones por parte de intermediarios
80. Boicot de proveedores y de distribuidores Acciones por parte de propietarios y directivos
81. Boicot de intermediarios
82. Negarse a alquilar o a vender propiedades
83. Cierre patronal
84. Rechazo de ayuda sectorial
85. "Huelga general" de comerciantes Acciones por parte de propietarios de recursos financieros 86. Retirada de depósitos bancarios
87. Negarse a pagar tarifas, efectos y pagos sobre valoraciones
88. Negarse a pagar deudas o intereses
89. Retirada de fondos y de créditos
90. Rechazo de impuestos
91. Rechazo de dinero procedente del gobierno Acciones por parte de los gobiernos 92. Embargo dentro del país
93. Listas negras de intermediarios
94. Embargo de los vendedores a otros países
95. Embargo de los compradores a otros países
96. Embargo comercial internacional MÉTODOS DE DESOBEDIENCIA ECONÓMICA: HUELGA Huelgas simbólicas
97. Huelga de protesta
98. Huelga sin previo aviso (huelga relámpago) Huelgas agrícolas
99. Huelga de campesinos
100. Huelga de trabajadores agrícolas Huelgas de grupos especiales
101. Rechazo de trabajos forzosos
102. Huelgas de presos
103. Huelgas de oficios (p. ej., de costureras)
104. Huelgas profesionales (asalariados o autónomos) Huelgas sectoriales normales
105. Huelga en el centro de trabajo
106. Huelga sectorial
107. Huelgas de solidaridad (prohibidas durante el régimen de M. Thatcher) Huelgas restringidas
108. Huelga al detalle (dejar de trabajar o marcharse de uno en uno)
109. Huelga "paragolpes" (cada vez en una empresa distinta)
110. Huelga de trabajo lento
111. Huelga de celo
112. Huelga de bajas por enfermedad
113. Huelga por dimisión
114. Huelga limitada (p. ej., negarse a trabajar fuera de las ocho horas diarias)
115. Huelga selectiva Huelgas multisectoriales
116. Huelga generalizada (sin llegar a participar la mayoría de los sectores económicos)
117. Huelga general Combinaciones de huelga y de cierre económico
118. Hartal (suspensión de la actividad económica en señal de protesta política, India)
119. Paralización económica (todo el mundo) MÉTODOS DE DESOBEDIENCIA POLÍTICA Rechazo de la autoridad
120. Interrupción o retirada del apoyo
121. Negarse a mostrar apoyo en público
122. Libros y alocuciones en favor de la resistencia Desobediencia ciudadana hacia el gobierno 123. Boicot de los órganos legislativos
124. Boicot de elecciones
125. Boicot de empleos y cargos públicos
126. Boicot de departamentos, agencias y otros organismos gubernamentales
127. Retirada de las instituciones educativas gubernamentales
128. Boicot a organizaciones respaldadas por el gobierno
129. Negarse a colaborar con los agentes de la autoridad
130. Retirada de carteles y distintivos propios
131. Rechazo de nombramientos
132. Negarse a disolver las instituciones existentes Alternativas a la obediencia ciudadana
133. Mostrarse reacio y tardar en cumplir las normas (p. ej., pago de impuestos)
134. Desobediencia cuando no existe supervisión directa
135. Desobediencia popular
136. Desobediencia camuflada
137. Negarse a disolver una asamblea o reunión
138. Sentada
139. No colaborar en reclutamientos y deportaciones
140. Ocultarse, huir y usar identidades falsas
141. Desobediencia civil de las leyes "ilegales" (p. ej., al pago del impuesto sobre la sal en la India colonial) Acciones por parte de los gobiernos
142. Negarse selectivamente a proporcionar ayudas gubernamentales
143. Bloqueo de líneas de mando e información
144. Obstaculización y obstrucción (científicos involucrados en la investigación atómica en la Alemania nazi)
145. No colaboración administrativa en general
146. No cooperación judicial
147. Ineficacia deliberada y no cooperación selectiva por parte de los agentes de la autoridad 148. Levantamiento militar Acciones gubernamentales a escala nacional
149. Evasivas y retrasos cuasilegales
150. No colaboración por parte de ciertos departamentos gubernamentales Acciones gubernamentales a escala internacional
151. Cambio de representaciones diplomáticas y de otros tipos
152. Retraso y cancelación de encuentros diplomáticos
153. Retirada del reconocimiento diplomático
154. Ruptura de relaciones diplomáticas
155. Retirada de organismos internacionales
156. Negarse a pertenecer a organismos internacionales
157. Expulsión de organizaciones internacionales (la Liga de Naciones expulsó a la URSS tras atacar Finlandia en 1939) MÉTODOS DE INTERVENCIÓN NO VIOLENTA Intervención psicológica
158. Autoexposición a los elementos
159. Ayuno: a) Ayuno de presión moral (San Patricio para un trato mejor a los esclavos)b) Huelga de hambre (incluso llegando a la muerte)c) Ayuno satyagrah (Gandhi, llegar a la autoconsciencia a través del sacrificio)
160. Juicio inverso (los defensores piden cuentas a fiscales y autoridades)
161. Acoso no violento Intervención física
162. Ocupación con sentada
163. Ocupación de pie
164. Entrar en medios de transporte público
165. Adentrarse en el agua (por ejemplo, en una playa)
166. Dar vueltas en grupo
167. Ocupación rezando
168. Incursión no violenta
169. Incursiones aéreas no violentas (p. ej., lanzando octavillas)
170. Invasión no violenta
171. Interposición no violenta (con el cuerpo)
172. Obstrucción no violenta (usando el cuerpo como barrera física)
173. Ocupación no violenta Intervención social
174. Establecimiento de nuevas pautas sociales (mezcla social saltándose las barreras)
175. Sobrecarga de instalaciones
176. Enlentecimiento de negocios legales
177. Entrar en un lugar hablando
178. Representación teatral tipo guerrilla
179. Instituciones sociales alternativas
180. Sistema de comunicación alternativo (p. ej., periódicos alternativos) Intervención económica
181. Huelga inversa (acudir a trabajar)
182. Encierro en el lugar de trabajo
183. Apropiación no violenta de terrenos
184. Quebrantamiento de bloqueos (Berlín durante la guerra fría)
185. Falsificación con fines políticos
186. Comprar recursos para impedir que otros accedan a ellos
187. Aprehensión de bienes
188. Dumping (venta deliberada por debajo del precio de coste)
189. Compra selectiva
190. Mercados alternativos
191. Medios de transporte alternativos
192. Instituciones económicas alternativas Intervención política 193. Sobrecarga de los sistemas administrativos (exceso de cumplimiento de la legalidad por parte de los ciudadanos en protesta por la intervención de EE.UU. en Vietnam)
194. Divulgación de la identidad de agentes secretos
195. Búsqueda activa de encarcelamiento
196. Desobediencia civil a leyes "neutras"
197. Trabajo sin colaboración
198. Doble soberanía y gobierno paralelo (Irlanda, 1919) Fuente: Gene Sharp, The politics of nonviolent action (3 vols.). Porter Sargent, Boston, 1973


YA BASTA, de que el poder del dinero se imponga a la moral, a la dignidad del PUEBLO DE MEXICO, apoyemos a Obrador

Etiquetas: